Este domingo pasado, día 5, un domingo normal, un domingo de ruta Pupas cualquiera, quedamos en la calle del carmen de Colindres, como un domingo cualquiera, y… sorpresa!!!! Marta ya esta esperando la salida de la ruta, pero aún no habíamos visto todo.
Se acercaba la hora de salir, las 9:30 como casi siempre y comenzaron a llegar bikers por todas partes, incluso Lipe! Al que hacia más de un año que no le veíamos sobre la bici.
Parecía una autentica qdd, y como no, como todas las cosas sin organizar, pues… nos pilló en bolas (como suele decirse).
-¿Para donde tiramos? ¿A Colindres? ¿A Gama? ¿Quién falta?... y entonces una llamada de Jose nos hace tomar una dirección… A los montes de Gama, (ya que el venia de camino).
Una pena que algunos de nuestros compañeros decidieran volverse y salir por una zona más cercana a su casa, la verdad es que el día estaba complicado.
La verdad es que para nosotros fue un acierto, ya que el día no estaba para mucho más, y los montes de esta zona están muy cerca de Colindres y dan mucho juego para pasar una mañana divertida sin repetir pistas, es un autentico laberinto.
Nos juntamos con Jose en Treto y salimos dirección Carasa por carretera, apenas un par de kilómetros más tarde entramos en el monte subiendo dirección Vidular por la pista central, una subida bastante larga y dura, aprox. 3,5km de fuertes rampas bastante complicadas por las lluvias caídas este ultimo mes.
A duras penas todos llegamos arriba, y fue en este momento donde Martín tomó el mando, el primer intento fue fallido, es todo tan parecido que a veces se complica tomar una pista determinada, y tuvimos que dar la vuelta y retroceder para tomar el sendero bueno, y mereció la pena, primero un pequeño sendero entre árboles para salir a una pista bastante empinada y resbaladiza, pero esta vez tocaba bajar, un descenso vertiginoso de barro y agua, hasta llegar a la parte baja de Gama, ahora tocaba de nuevo coger altura, así que de nuevo a subir, la lluvia incesante nos acompañó durante toda la mañana.
Al llegar al alto, los primeros aprovecharon para comer algo, mientras llegábamos los más rezagados, y de nuevo tocaba bajar, tras pasar una par de profundas pozas iniciamos el rápido descenso que nos dejaría de nuevo en el mismo punto donde terminó el descenso anterior.
En este punto algunos decidieron regresar a casa, las obligaciones mandad.
Y los demás, ¿Qué hacemos? Pues subir otra vez para después volver a bajar, así podríamos estar todo el día sin apenas repetir pista, esta vez la subida era algo más tirada, pero con un último tramo muy técnico por no decir imposible.
Tras reagruparnos todos arriba comenzamos el descenso, rápido, muy rápido, y divertidísimo, se combinaban zonas resbaladizas con riachuelos y pequeños pasos de troncos, pedregales y alguna subidita, para al fin llegar a una pista ancha de arcilla pegajosa que recorrimos hasta el río, en verano un pequeño riachuelo, pero en invierno…
¿Quién será el primer valiente? Como no podía ser de otra forma Lipe y Diego se tiraron de cabeza, INCREIBLE, no se veían las bicicletas, con el agua por la cintura consiguieron cruzar el río a golpe de pedal, y claro los endureros no podíamos ser menos, Primero Javitxu (yo), seguido por Víctor, y Semi… pocos fuimos los valientes (locos) que nos atrevimos, menudo espectáculo! Impresionaba ver las bicis desaparecer bajo el agua.
Tras pasar semejante obstáculo decidimos iniciar el camino de regreso a Colindres, justo entonces a nuestro compañero de ruta Pepe (Negrete) se le averió la bici y se fue a casa a golpe de empujón.
Una mañana divertida y en compañía de valientes bikers que se atreven con todo…
Nos vemos ...