El despertador sonó demasiado pronto esta mañana, las 5:30 am ¡estamos como chotas! en fin, me calenté el desayuno, me vestí, cargué la burra en el coche y me fui a buscar a mis compañeros de ruta, primero Diego y después Víctor. Por cierto, si alguien se lo preguntaba, si a esa hora ya han puesto las calles…
Salimos dirección Arija a las 7:00am aprox. Y paramos en Reinosa a tomar un café, a medida que nos acercábamos a Arija se nos quitaban los miedos por el tiempo, frío y demás, parecía que el día amanecía despejado, el sol calentaba un poco y la sensación térmica era de menos frío que en Colindres.Poco a poco llegaban más locos como nosotros, conocidos del foro, los ramaliegos, cumbrales, así hasta algunos más de 60 bikers.
Tras la foto de grupo de rigor emprendimos la marcha a eso de las 9:30 de la mañana, en compañía de un mastin de Arija que nos acompañó toda la ruta.
Comenzamos rodando por carretera, tras un par de kilómetros de calentamiento entramos en el primer sendero de monte.
Las imágenes del bosque eran impresionantes, todo, el suelo cubierto de hojas que escondían trampas de barro y los paisajes en tonos marrones daban paso a zonas abiertas de terreno irregular y pistas de tierra.Fue en el primer escampado, tras unos 10km donde hicimos el primer reagrupamiento, reanudamos la marcha internándonos de nuevo en un bosque, al mirar alrededor daban ganas de lanzarse bosque a través esquivando los árboles.De uno en uno fuimos atravesando el estrecho sendero para continuar por los caminos de parcelarias hasta llegar a ….. .A partir de aquí, un tramo de carretera con una subida que se hacía bastante durilla, pero los paisajes dejaban ver un terreno lleno de posibilidades endureras, grandes rocas con rampas, saltos, en fin, ya volveremos en verano para disfrutar de otra rutilla por la zona.
Al llegar arriba, hicimos el segundo reagrupamiento, una parada demasiado larga, el frío comenzaba a hacerse latente.Cuando llegaron los mas rezagados, por averías en su mayor parte pinchazos, continuamos la ruta descendiendo por una pista que se había convertido en un autentico patatal por el barro.
Tras un par de zonas técnicas entramos en otro sendero por el monte Hijedo. Aquí hicimos la parada de rigor en un mirador con unas vistas impresionantes del valle que momentos mas tarde recorreríamos… ¡impresionante!
A partir de aquí todo diversión, con Marta como guía entramos en el sendero, muy fácil perderse, pero divertido a mas no poder, tramos de bajada técnica enlazaban con cortas zonas de subida, rocas, trocos cruzados, rampas de barro, tras una parada para sacar alguna fotillo, llegamos abajo con la adrenalina a tope, el grupo se reunió en un escampado para seguir la ruta por el bosque con el río como guía.
Tras 20km de ruta habíamos vadeado el río unas 5 veces, tras algunas caídas sin importancia, y averías varias, el grupo hizo otra parada de espera, esta vez matadora, no quedamos todos helados.Salimos del bosque y continuamos por una pista ancha, en su primer tramo de bajada para posteriormente ir cogiendo altura, era una pista con buen firme y poco técnica, pero al llegar arriba se produjo otro pinchazo, la mayor parte del grupo continuó la marcha, esperando en el siguiente alto, una campa a la cual se llegaba tras una subida bastante llevadera, pero que se iba haciendo notar en las piernas.
Se empezaba a levantar viento helado, lo cual convirtió la vuelta a los coches en un autentico infierno para la mayoría, con los pies mojados por los vadeos del río el frío intenso se fue convirtiendo en dolor.La vuelta a los coches por carretera, aproximadamente unos 10km, lo peor de toda la ruta, pero sinceramente mereció la pena el sacrificio habiendo hecho el resto de la ruta.
Comenzamos rodando por carretera, tras un par de kilómetros de calentamiento entramos en el primer sendero de monte. Las imágenes del bosque eran impresionantes, todo, el suelo cubierto de hojas que escondían trampas de barro y los paisajes en tonos marrones daban paso a zonas abiertas de terreno irregular y pistas de tierra.Fue en el primer escampado, tras unos 10km donde hicimos el primer reagrupamiento, reanudamos la marcha internándonos de nuevo en un bosque, al mirar alrededor daban ganas de lanzarse bosque a través esquivando los árboles.De uno en uno fuimos atravesando el estrecho sendero para continuar por los caminos de parcelarias hasta llegar a ….. .A partir de aquí, un tramo de carretera con una subida que se hacía bastante durilla, pero los paisajes dejaban ver un terreno lleno de posibilidades endureras, grandes rocas con rampas, saltos, en fin, ya volveremos en verano para disfrutar de otra rutilla por la zona.Al llegar arriba, hicimos el segundo reagrupamiento, una parada demasiado larga, el frío comenzaba a hacerse latente.Cuando llegaron los mas rezagados, por averías en su mayor parte pinchazos, continuamos la ruta descendiendo por una pista que se había convertido en un autentico patatal por el barro.Tras un par de zonas técnicas entramos en otro sendero por el monte Hijedo. Aquí hicimos la parada de rigor en un mirador con unas vistas impresionantes del valle que momentos mas tarde recorreríamos… ¡impresionante!A partir de aquí todo diversión, con Marta como guía entramos en el sendero, muy fácil perderse, pero divertido a mas no poder, tramos de bajada técnica enlazaban con cortas zonas de subida, rocas, trocos cruzados, rampas de barro, tras una parada para sacar alguna fotillo, llegamos abajo con la adrenalina a tope, el grupo se reunió en un escampado para seguir la ruta por el bosque con el río como guía.Tras 20km de ruta habíamos vadeado el río unas 5 veces, tras algunas caídas sin importancia, y averías varias, el grupo hizo otra parada de espera, esta vez matadora, no quedamos todos helados.Salimos del bosque y continuamos por una pista ancha, en su primer tramo de bajada para posteriormente ir cogiendo altura, era una pista con buen firme y poco técnica, pero al llegar arriba se produjo otro pinchazo, la mayor parte del grupo continuó la marcha, esperando en el siguiente alto, una campa a la cual se llegaba tras una subida bastante llevadera, pero que se iba haciendo notar en las piernas. Se empezaba a levantar viento helado, lo cual convirtió la vuelta a los coches en un autentico infierno para la mayoría, con los pies mojados por los vadeos del río el frío intenso se fue convirtiendo en dolor.La vuelta a los coches por carretera, aproximadamente unos 10km, lo peor de toda la ruta, pero sinceramente mereció la pena el sacrificio habiendo hecho el resto de la ruta.Nada mas llegar nos cambiamos la ropa, y tras unos 15 minutos la sangre circulaba de nuevo por los pies. Nos despedimos de nuestros compañeros de ruta y volvimos a casa, aproximadamente a las 6 de la tarde.
La ruta, algo mas de 40km, y 7 horas aproximadamente, larga, pero preciosa, y aunque parezcamos masocas, con ganas de volver, pero en verano.
P.D. Agradecer a todos los foreros que además de dar pedales se dedican a sacar fotos para que tengamos este recuerdo de las rutas.
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