A las 9:00 de la mañana ya estaba en la zona de salida, charlando con mi amigo Pedro Maestre y como no Marta, tomamos un café y enseguida llegó el grueso endurero de la zona cantabra,
Martin, Victor y Pedro (Barrojo) de los Pupas, y Chelis, Michel, Javi de Ramales y en fin... todos los compañeros del lado oscuro.
Tras las ultimas instrucciones, advertencias, recomendaciones y comentarios de raspu, amenizador del cotarro, se tomo la salida.
Primero una vuelta de reconocimiento por el pueblo con escaleras incluidas, y enseguida para arriba, las sensaciones eran buenas, me veia ligero y tomaba bien todas las trazadas, poco a poco fuimos cogiendo altura y la grupeta tomaba forma, Victor y Martin, Pedro, Alberto (Mecanico de Maestre) y yo.
De repente, sin esperarlo, la subida de todos los años se tornó en bajada por un estrecho sendero entre arboles y de repente escalones, pedrolos, regatos, saltos y un cortafuegos...
Alberto subió montado, Pedro a medias y yo a pata, pero manteniendolos a raya... al llegar arriba me monté en la bici de un bote y sali a su caza como un spunik, no tardaos en reagruparnos para continuar subiendo, mientras Victor y Martin perdieron la estela.
Llegamos al estrecho sendero que conduce al punto mas alto de la ruta, el de todos los años, y cada uno como pudo fuimos llegando arriba, los tres mosqueteros continuamos juntos para afrontar la bajada, a tope hasta el habituallamiento, por campa, un tramito de pista y trialera de pedrolo suelto, picadota con un descender que andaba pegando botes y al que pude adelantar en los ultimos 20mts de bajada.
Comimos algo, recuperamos pulsaciones y todo para abajo, tramos de sendero con troncos cruzados, cortados de 1 metro, trialeras y una picada entre los tres de flipar, llegando abajo pillamos de nuevo al descender con su cuadrilla, y subimos de nuevo a la campa de los alemanes, zona de habituallamiento a buen ritmo, sabiamos que no estabamos muy atras, asñí que no perdimos mucho tiempo en comer apa no perder posiciones.
Continuamos ascendiendo por pista de grijo, hasta llegar al bosquecillo, pasamos facilmente, (esperabamos algo peor) y de nuevo subir el ultimos cortafuegos) Berto, como siempre montado, Pedro y yo como pudimos, arriba, tomamos aire y a por la traca final, Berto tomo la delantera por la zona de trialeras, yo le seguía de cerca y Pedro hacia lo imposible para no descolgarse, justo antes de empezar el descenso tomé la delantera y me di rienda suelta...
Se nos nubló la vista y ya no conociamos a nadie
Los cierto es que bajaba a tope mirando por el rabillo del ojo, Pedro no venia y Berto pegado como una lapa, apenas tocamos freno en el sendero, adelantamos a algunos bikers con problemas y salimos a la zona rapida, nos lanzamos a tope, en una de las curva nos encontramos al descender pinchado, pero como seguia bajando el tio... hasta que se dió un ostion como un pan...
En la ultima parte del descenso, bosquecillo imposible, una rama se me enrredó en el cambio y perdi de vista a Alberto, rapidamente solucione el problema y continué hasta el pueblo donde entré con el a la par,
y de aquí a meta, lavamos las bicis y nos cambiamos,
tomaos un cerveza, 
comimos barbacoa y recogimos nuestros premios.
IMPRESIONANTE, buenas sensaciones, buen recorrido, buena gente, buen comer y buen beber, que más se "puei peir"?
